Soluciones Espiral es una agrupación que gestan trabajadores por cuenta propia cuyo fin es la concepción de proyectos en el ámbito de la informática, la electrónica, las telecomunicaciones y la automática.
En declaraciones a Negocios en Cuba,uno de sus integrantes, el licenciado en Informática Abel Bermejo, recalcó que una de las mayores motivaciones del grupo es la posibilidad de sustituir importaciones en esas esferas.

La contribución que se proponen, aclaró, no estriba solo en prescindir de ciertas materias primas adquiridas en el extranjero, sino en la capacidad de aportar conocimientos tecnológicos fundamentales y el asesoramiento técnico que, a su vez, generan considerables erogaciones.

Nuestro concepto, reveló, es la creación de prototipos para su ulterior desarrollo industrial.

Se trata, dijo, de soluciones de tecnología integrada que abarquen desde la automatización requerida y la transmisión –si fuera precisa–, hasta la informatización para lograr el control en un cuadro de mando o en un dispositivo móvil.

De conjunto con varios especialistas, como Ariel Hernández y Abel Barrientos, el grupo ha llegado a nuclear a más de una decena de miembros aunque, en dependencia de las necesidades, pueden contratar a otras personas.

Una de las alianzas exitosas con el sector estatal se presentó ante el apremio de reponer las placas defectuosas de los equipos que fabrican hielo para diversas entidades turísticas. Ese propósito fue lo que les facilitó el acercamiento a la empresa Tecnotur, refirió Barrientos.

Hasta ahora, abundó, hemos entregado 50 de esas tarjetas, que internacionalmente pueden costar más de 500 euros;nosotros las obtenemos a partir de elementos ociosos y componentes que se podían reutilizar, como es el caso de las máquinas frapeadoras.

En resumen, reveló, hicimos el contrato y hoy desarrollamos esos implementos en Cuba, con una disminución de casi el 60 por ciento del costo.

Amplios horizontes

La agrupación abarca terrenos disímiles y por eso no es raro que intervenga en proyectos didácticos y en otros relacionados con la producción pecuaria.

Justamente, uno de los planes atractivos en los que participa es la sistematización de la enseñanza de la robótica en el país.

Todo comenzó, recordó Bermejo, con la solicitud de Cinesoft para la formación de talleres dirigidos a niños en ese ámbito.

Aseguró el informático que, a partir del resultado de los cursos a infantes entre 7 y 14 años, quedó demostrada la factibilidad de la introducción de la robótica en el sistema educativo y, mediante una licitación, Cinesoft procuró la creación de prototipos para generalizar la experiencia.

Según Bermejo, ese anhelo, que lleva más de tres años de gestado, deviene en un proyecto multifactorial que lidera el Instituto Cubano de Ciencias Pedagógicas y conforman maestros y metodólogos que validan los programas en los diferentes niveles de enseñanza.

Siempre tomando en cuenta, apuntó, que la robótica no es el fin sino un medio para que el niño adquiera determinadas habilidades desde el punto de vista cognitivo.

En razón de lo anterior, ya diseñaron sendos prototipos orientados a la enseñanza preescolar y primaria, y para el nivel secundario –a solicitud de Cinesoft y por iniciativa propia– pretenden introducir la domótica.

Precisó que la mayoría de los componentes del robot son elementos ociosos de empresas estatales, como es el caso, por ejemplo, delas ruedas, que resultan ser de los dispositivos apuntadores (los conocidos mouses o ratones) en desuso; y acotó que las placas las obtienen a través de un contrato con otro cuentapropista que las fabrica.

Una línea importante de trabajo para Soluciones Espiral es la automatización de los procesos agrícolas.

En ese sentido, confirmó Barrientos, llevan más de un año colaborando con la Empresa de Informática y Comunicaciones del Ministerio de la Agricultura.

La meta, remarcó, es la creación de una vaquería inteligente a partir de la automatización de cinco procesos en esos sitios.